Más de 5 mil menciones generó, durante las últimas horas, en las redes sociales el fallo del ministro Mario Carroza en el que condenó a once ex militares por el homicidio de Rodrigo Rojas de Negri y el homicidio frustrado de Carmen Gloria Quintana (ver recuadro).

Según el observatorio “Política y Redes Sociales” de la U. Central, “la conversación termina aludiendo a @joseantoniokast”, ya que los “internautas lo vinculan con Julio Castañer”.

Este efecto, más allá del cibermundo, abre un flanco en las aspiraciones para llegar a La Moneda de José Antonio Kast que figura dentro los más mencionados en sondeos de opinión, junto a Beatriz Sánchez y Joaquín Lavín. En las últimas encuestas sobre preferencias presidenciales espontáneas, el ex diputado y ex militante UDI, registra un 11% en Criteria Research y un 7% en Cadem.

Entre los tres condenados como autores del crimen (hay otros ocho condenados como cómplices), figura el coronel (r) Julio Castañer, “amigo” de Kast y supuesto coordinador del movimiento Acción Republicana en Magallanes, cargo que no ha sido reconocido por el movimiento que lidera el ex diputado.

Si bien Kast siempre ha transparentado su cercanía al mundo militar y defiende lo que él llama “la obra” del gobierno de Pinochet, el caso de Castañer le complica pues en los últimos años ha insistido en la inocencia de su amigo y en la falta de pruebas.

Esta mañana contactado por La Segunda Kast no quiso referirse al tema. Pero sí lo hizo en, por lo menos, tres ocasiones anteriores.

La primera en 2016, en La Red cuando entrevistado por Beatriz Sánchez, aseguró que en este caso “se sometió a proceso a don Julio Castañer, lo trajeron a Santiago (…) no hay ni un testigo de los que están ahí, salvo uno, que diga que él fue” (ver recuadro).

Más aún, promovió la tesis de que las quemaduras fueron producto de otra situación: un conscripto supuestamente habría pateado “la bomba molotov” para tratar de repelerla, la cual habría alcanzado a Quintana y a Rojas.

Después, el 8 de agosto de 2017, en el programa el “Sillón de Pedro” de TVN, Kast reiteró sus dichos. Y le dijo a Pedro Carcuro que “hay personas que injustamente han sido procesados. Siempre pongo el ejemplo de mi amigo Julio Castañer que fue involucrado en el caso de Carmen Gloria Quintana y Rodrigo Rojas”.

La tercera vez, fue en julio de 2018, en el programa “La Cuarta Late”, donde recalcó que en la investigación del Caso Quemados “no se ha podido acreditar que haya tenido participación activa (…) él llegó minutos después de que esto ocurriera. Todos los soldados conscriptos dicen que él no tuvo ningún grado de participación”.

Además de la amistad con Kast, la condena también golpea Acción Republica creado en abril de 2018 dado que Castañer fue identificado inicialmente como uno de los coordinadores regionales del movimiento.

El 10 de mayo de 2018, en entrevista con el diario El Pingüino de Punta Arenas, Lucía Cárcamo, coordinadora territorial de “Acción Republicana” de Magallanes, habría asegurado que en la composición regional del movimiento participaban “Gerardo Bombín, también está Mario Esquivel, y Julio Castañer, que comparte conmigo la coordinación regional”.

A los pocos días de esa publicación Kast salió a desmentir: “Se dice que es coordinador del movimiento en que yo participo, pero no es coordinador de nada. Es una persona que yo conozco, que en alguna reunión habrá estado, pero no es coordinador”. Esa versión fue reiterada hoy por Acción Republicana.

Después de treinta y dos años, 11 ex militares fueron condenados por la responsabilidad de quemar vivos a Rodrigo Rojas de Negri y Carmen Gloria Quintana, el 2 de julio de 1986.

Según el fallo, las dos víctimas fueron interceptadas por una patrulla cuando se desarrollaba una jornada de protesta nacional. Ellos fueron golpeados y rociados con bencina, antes de prenderles fuego.

El juez Mario Carroza condenó (a10 años y un día de presidio) a Julio Ernesto Castañer González, Iván Humberto Figueroa Canobra y Nelson Fidel Medina Gálvez, en calidad de autores del homicidio calificado de Rojas y el homicidio calificado en grado de frustrado de Quintana.

También sentenció a otros ocho exuniformados en calidad de cómplices, con penas de tres años y un día de cárcel, pero con beneficio de libertad vigilada.